26 may 2008

La inevitable huelga de Monitor, Columna de Ciro Gómez Leyva en MILENIO

Una de las muchas cosas admirables que hizo José Gutiérrez Vivó en la radio informativa fue mantener su programa en la lista de los cinco más escuchados en el primer cuatrimestre de 2008. Con una sola frecuencia de AM, sin dinero para pagar o invertir, su público lo siguió hasta el último momento.

El viernes estalló la huelga en Monitor después de una decena de emplazamientos. La empresa de Gutiérrez Vivó no pudo cumplir siquiera el pago de una quincena comprometida. Y con atrasos de cuatro a siete meses, los empleados dijeron basta.

“Hubo comercialización de septiembre a la fecha”, me dice José Luis Reyes, conductor y periodista de Monitor. “¿Si estaban entrando recursos, por qué no se reflejó en el pago de nuestros salarios?”.

A diferencia de hace un año, Gutiérrez Vivó no trató de pasar por víctima esta vez. Quizá porque ya no tenía sentido. Su fracaso como empresario es tan grande como su leyenda frente al micrófono.

El regreso al aire dependerá ahora no de lo que decida un tribunal laboral, sino el 13 Colegiado de lo Civil, que de darle validez al laudo de la Corte de Comercio de París ordenaría al poderoso Grupo Radio Centro pagarle a Gutiérrez Vivó 21 millones de dólares, más unos cuatro millones de intereses. Miles de radioescuchas podrían volver a sintonizar así un informativo en el que han confiado desde hace treinta y tantos años.

Pero que nadie se haga ilusiones. Ganar hoy con rotundidad una batalla jurídica en México es prácticamente imposible. Por más justa que sea la causa, tal parece que siempre se impondrá quien tenga los recursos para alargar el pleito: el más fuerte, el más rico.

Si en el camino se pierde un canal de televisión o una estación de radio, no importa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario